Amor Muñoz (Ciudad de México, 1979) es una artista visual, docente y gestora cultural que se ha caracterizado por establecer una relación entre arte, tecnología y sociedad, buscando desarrollar el potencial creativo de la gráfica, expandiéndola. Esta es parte de una entrevista en la que la artista habla de su interés en el arte como una herramienta de transformación:

P/ Artistas y diseñadores tienen una responsabilidad grande al trabajar con artesanos y comunidades…

A. M.: Lleva muchos años el boom de los diseñadores trabajando con comunidades. Es un tema delicado que no se ha tocado del todo. Hay diseñadores que se nombran activistas sólo por darles trabajo. Al final esos productos de diseño terminan en tiendas para gente de cierto poder adquisitivo. Mientras la gente de la comunidad se queda en la maquila su imagen se explota en la mercadotecnia del producto. Hay que empoderar a las comunidades, sí, pero no mediante los diseñadores o los artistas.

P/ ¿De qué forma se desarrolló el modelo de los proyectos Yuca_tech y Oto_Lab?

A. M.: Primero fue Yuca_tech, que se desarrolló con mujeres de Yucatán, que habitan en la región henequenera donde no hay luz, que tejen con telar de cintura. Al aprender y aplicar conceptos de tecnología hicieron paneles solares e integraron luces leds con material recargable a sus objetos. Es una forma de ligar a la sociedad con la tecnología, generando un vínculo entre el objeto tecnológico, que casi siempre está despersonalizado, y cosas de uso cotidiano.

En el caso de Oto_Lab, que se desarrolló el año pasado en el MUCA Roma, se enfocó en un grupo otomí que vive cerca de la Plaza Luis Cabrera de la colonia Roma. En esta comunidad hay un conjunto de mujeres que hacen muñecas llamadas Marías, que venden en situación de calle en 200 pesos. Hicimos un taller de tecnología que ellas aplicaron a sus muñecas.

La tecnología no está peleada con la tradición, puede servir para revalorar la artesanía.

Más información en: NOTICIA

Fuente: Amormunoz.net